Novedades de la ciencia: Investigadores financiados por los NIH identifican otra posible anomalía cerebral relacionada con el SIDS

Martes, Junio 6, 2023
Padre inclinado sobre la cuna donde se encuentra un bebé dormido boca arriba.
En un ambiente de sueño seguro para bebés: La superficie para dormir es plana (como una mesa) y está nivelada (no en ángulo ni inclinada), y está cubierta únicamente con una sábana ajustable. El lugar para dormir no tiene objetos, juguetes ni otros artículos. Y el área para dormir está en la misma habitación donde duermen los padres, pero en un lugar separado de su cama.
Crédito: Seguro al Dormir, https://espanol.nichd.nih.gov/actividades-proyectos/sts

Investigadores con el financiamiento parcial de los Institutos Nacionales de la Salud han identificado una segunda anomalía en el receptor cerebral en el tejido de los casos de síndrome de muerte súbita del bebé (SIDS). Al igual que la anomalía que el grupo identificó anteriormente, el receptor se une a la serotonina, una sustancia química que transmite mensajes entre las neuronas. Aunque la serotonina participa en diversas funciones como el estado de ánimo, el sueño, la digestión y la cicatrización de heridas, la anomalía que identificaron los investigadores se encuentra en la médula o tronco encefálico, una región involucrada en el despertar, la excitación y la respiración.

Los autores del estudio creen que las anomalías subyacen a una vulnerabilidad en el cerebro del bebé y pueden ser responsables de la incapacidad para despertarse y respirar en condiciones de poco oxígeno, como cuando la boca y la nariz de un bebé quedan cubiertas por la ropa de cama mientras duerme boca abajo.

Los hallazgos pueden algún día contribuir al desarrollo de una prueba para identificar a los bebés con mayor riesgo de padecer SIDS, así como formas de prevenir que ocurra este síndrome.

El estudio fue realizado por Robin Haynes, Ph.D., y Hannah Kinney, M.D., del Boston Children's Hospital [Hospital Infantil de Boston], y colegas. Aparece en la revista Journal of Neuropathology and Experimental Neurology. El financiamiento de los NIH provino del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver.

Antecedentes

El SIDS es la muerte súbita e inesperada de un bebé aparentemente sano de menos de 1 año que permanece sin explicación después de una investigación del caso, que incluye la autopsia, el examen de la escena de la muerte y la revisión del historial médico, indicaron los autores. Es la principal causa de muerte después del período neonatal, lo que representa 0.39 muertes por cada 1,000 nacidos vivos. La muerte está asociada con un período de sueño.

En estudios anteriores, los autores encontraron niveles más bajos de serotonina en los cerebros de los bebés que murieron de SIDS. También encontraron cantidades menores del receptor de serotonina 1A en estudios previos del tejido de la médula (tronco encefálico) de casos de SIDS, un área que controla la función cardíaca y pulmonar durante el sueño. Otros estudios de animales de laboratorio sugieren que otro tipo de receptor en el tronco encefálico, el receptor de serotonina 2A/C, también participa en la función cardíaca y pulmonar durante el sueño, lo que incluye despertarse y respirar profundamente en respuesta a niveles altos de dióxido de carbono y bajos de oxígeno.

Para el estudio actual, los investigadores analizaron los troncos encefálicos de 70 bebés que murieron entre 2004 y 2011, y los compararon con el tejido de 12 bebés que murieron por otras causas.

Resultados

Los investigadores encontraron alteraciones significativas en los receptores de serotonina 2A/C de los casos de SIDS en 7 de cada 10 áreas del cerebro. Según los autores, los hallazgos sugieren que una anomalía biológica puede predisponer a ciertos bebés a morir en determinadas circunstancias. Los autores plantean la hipótesis de que, en tales casos, es más probable que ocurran muertes por SIDS cuando convergen tres elementos: un período crítico (un período temprano en el desarrollo de la actividad cerebral que rige la función cardíaca y pulmonar), un estrés externo (como dormir boca abajo) y una vulnerabilidad subyacente (una anomalía en la región del cerebro que controla la respiración y la vigilia durante el sueño).

Importancia

Los autores creen que los niveles bajos de serotonina en general pueden combinarse con anomalías en la serotonina 1A y en el receptor 2A/C para aumentar el riesgo de SIDS.

“Actualmente, no tenemos medios para identificar a los bebés con anomalías biológicas en el sistema serotoninérgico”, dijo el Dr. Haynes. “Por lo tanto, adherirse a las prácticas de sueño seguro sigue siendo fundamental”.

La campaña Seguro al Dormir® dirigida por el NICHD brinda información sobre cómo proporcionar a los bebés un ambiente seguro para dormir y otras formas de reducir el riesgo de SIDS en https://espanol.nichd.nih.gov/actividades-proyectos/sts.

Referencia

Haynes, RL, et al. Altered 5-HT2A/C receptor binding in the medulla oblongata in the sudden infant death syndrome (SIDS): Part I. Tissue-based evidence for serotonin receptor signaling abnormalities in cardiorespiratory- and arousal-related circuits. Journal of Neuropathology & Experimental Neurology. 2023.