Los hallazgos podrían proporcionar información sobre cómo el COVID-19 afecta a los inmigrantes a nivel nacional
Los hombres inmigrantes en edad laboral, especialmente los latinos, tienen más probabilidades de morir por el COVID-19 que sus homólogos nativos, según un estudio de los registros de defunción de Minnesota financiado por los Institutos Nacionales de la Salud. Debido a que los datos de la incidencia del COVID-19 según el estado migratorio no se recopilan a nivel nacional, los hallazgos brindan información sobre cómo las tendencias de mortalidad del COVID-19 difieren entre los residentes estadounidenses y los nacidos en el extranjero.
La mayoría de las muertes por el COVID-19 entre los residentes nacidos en los EE. UU. ocurrieron en hogares para adultos mayores a fines de 2020. Por el contrario, las muertes entre los habitantes de Minnesota nacidos en el extranjero se produjeron fuera de los centros de atención a largo plazo y más temprano en la pandemia. Los autores escribieron que la diferencia subraya la necesidad de estrategias de intervención dirigidas a las comunidades de inmigrantes.
El estudio fue realizado por Kimberly M. Horner, estudiante de doctorado, y sus colegas de la University of Minnesota [Universidad de Minnesota]. Aparece en Population Research and Policy Review. El estudio fue financiado en parte por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano (NICHD) Eunice Kennedy Shriver de los NIH.
Antecedentes
Los estudios anteriores demostraron que los inmigrantes recientes a menudo son más saludables que los residentes nacidos en los EE. UU. y que el estado de salud de los inmigrantes tiende a converger con la salud de los nacidos en los EE. UU. cuanto más tiempo permanece una población inmigrante en el país. Antes de la pandemia, los inmigrantes generalmente tenían mejor salud que los residentes nacidos en los EE. UU. en casi todas las categorías de enfermedades, excepto las enfermedades infecciosas.
Sin embargo, los inmigrantes también enfrentan riesgos únicos por el COVID-19. Muchos residen en viviendas multigeneracionales, lo que puede exponer a las personas mayores más susceptibles a los niños que pueden contagiarse el virus en las escuelas. Es posible que aquellos con conocimientos limitados de inglés tengan dificultades para acceder a los servicios de salud y comprender las recomendaciones de salud pública. Muchos inmigrantes carecen de seguro de salud y de acceso a la atención médica de rutina. Los inmigrantes también tienen más probabilidades de desempeñarse en trabajos de primera línea donde el distanciamiento social es difícil. También es posible que los inmigrantes indocumentados sean reacios a buscar atención médica debido a las preocupaciones sobre su estado migratorio.
Para evitar disuadir a los inmigrantes de buscar atención, la información sobre el país de origen y el estado migratorio no se recopila a nivel federal, por lo que las estadísticas nacionales sobre los casos del COVID-19 entre los inmigrantes no están disponibles. Sin embargo, debido a que muchos certificados de defunción estatales contienen información sobre la condición de inmigrante, los estudios de las tasas de mortalidad del COVID-19 a nivel estatal podrían proporcionar información sobre las diferencias en las tendencias de mortalidad entre los residentes nacidos en los EE. UU. y los nacidos en el extranjero.
En el estudio actual, los investigadores analizaron los certificados de defunción de la Oficina de Registros Vitales del Departamento de Salud de Minnesota del 1 de enero al 31 de diciembre de 2020. También analizaron los datos de la población de todo el estado para estimar las proporciones de residentes nacidos en el extranjero y de residentes nacidos en los EE. UU. en el estado. Minnesota tiene una población total de 5.6 millones de personas, con casi 500,000 inmigrantes.
Resultados
Casi el 90 % de las muertes por el COVID-19 en 2020 se produjeron entre residentes de Minnesota nacidos en los EE. UU. Sin embargo, los residentes del estado nacidos en el extranjero murieron a una edad promedio más joven (poco más de 72 años) que los residentes nacidos en los EE. UU. (82 años). En comparación con los residentes nacidos en los EE. UU. y otros grupos nacidos en el extranjero, los latinos nacidos en el extranjero que murieron por el COVID-19 tenían la edad promedio más baja al momento de la muerte (poco más de 64 años), la proporción más alta de muertes masculinas (alrededor del 70 %) y el nivel educativo alcanzado más bajo, con más del 60 % con menos de un diploma de escuela secundaria.
Las muertes entre los residentes blancos nacidos en los EE. UU. y los nacidos en el extranjero tendían a ocurrir en personas mayores de 65 años. Los latinos nacidos en el extranjero tuvieron una mayor proporción de muertes entre aquellos en la población que se encontraban en edad laboral, de 20 a 64 años.
Importancia
Los investigadores concluyeron que los residentes de Minnesota nacidos en el extranjero experimentaron tasas de mortalidad más altas que los residentes nativos del estado y que estas muertes ocurrieron a una edad más temprana, en comparación con los nacidos en los Estados Unidos. Estos hallazgos podrían proporcionar información sobre cómo el COVID-19 afecta a los inmigrantes a nivel nacional y es posible que deriven en programas enfocados en reducir el riesgo de la enfermedad entre estas poblaciones.
Referencia
Horner, KM, et al. A first look: disparities in COVID-19 mortality among U.S.-born and foreign-born Minnesota residents. Population Research and Policy Review. 2021. https://doi.org/10.1007/s11113-021-09668-1 
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Acerca del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver (NICHD): El NICHD lidera la investigación y la capacitación para comprender el desarrollo humano, mejorar la salud reproductiva, mejorar la vida de niños y adolescentes, y optimizar las habilidades para todos. Si desea más información, visite https://espanol.nichd.nih.gov.
Acerca de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH): NIH, la agencia de investigación médica de los EE. UU., incluye 27 institutos y centros, y es un componente del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. NIH es la principal agencia federal que realiza y apoya investigaciones médicas básicas, clínicas y traslacionales, y que investiga las causas, los tratamientos y las curas para enfermedades comunes y raras. Para obtener más información sobre los NIH y sus programas, visite https://salud.nih.gov.
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