Aviso de prensa: Un estudio con ratones sugiere que la respuesta de los padres a la angustia infantil es innata, pero se adapta al cambio

Un estudio financiado por los NIH aclara cómo los padres pueden adaptarse para satisfacer las necesidades cambiantes de un bebé

Miércoles, Octubre 7, 2020
Bebé llorando de pie tras la barandilla de la cuna.
Crédito: Imagen de archivo

QUÉ:

Un estudio realizado con ratones por los Institutos Nacionales de la Salud sugiere que los padres tienen una capacidad innata para responder a los gritos de ayuda de un bebé y esta capacidad puede servir como base a partir de la cual un padre aprende a adaptarse a las necesidades cambiantes de un bebé. El estudio fue realizado por Robert C. Froemke, Ph.D., de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York, y sus colegas. Aparece en Nature.

Cuando las sitúan con ratones que han dado a luz, las hembras sin pareja ayudarán con el cuidado de las crías recién nacidas. Los investigadores evaluaron la capacidad de estos ratones niñeras para responder a una variedad de gritos de angustia registrados de recién nacidos. Estos incluían gritos de angustia típicos, así como una variedad de llantos que habían sido alterados digitalmente, acelerados o ralentizados para incluir más o menos sílabas que las vocalizaciones de angustia típicas.

Las niñeras experimentadas respondieron a los típicos llantos de angustia el 80 % del tiempo, en comparación con la tasa de respuesta inicial del 33 % de las niñeras novatas. Tanto las niñeras experimentadas como las novatas al principio respondieron solo a un ritmo bajo a los llantos alterados, pero ambas aprendieron a reconocer estos llantos después de un tiempo. Con el tiempo, incluso las novatas respondieron a algunos tipos de llamadas modificadas hasta en un 75 % del tiempo. De manera similar, los centros auditivos en los cerebros de las niñeras se activaron cuando los animales escucharon las llamadas, en niveles correspondientes a sus respuestas iniciales, y aumentaron a medida que respondieron mejor a los gritos. Los investigadores también descubrieron que administrarles oxitocina mejoró la velocidad a la que los ratones respondieron a los gritos, mientras que el bloqueo de la oxitocina natural en el cerebro redujo su tasa de respuesta. La oxitocina en el contenido de Inglés ha sido relacionada con el vínculo materno y otras conductas.

Estos resultados proporcionan evidencia de que los nuevos padres pueden estar programados para responder a ciertos tipos de llantos de sus bebés, pero también tienen la capacidad de expandir su repertorio para incluir también otros tipos de vocalizaciones.

El estudio fue financiado parcialmente por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver, el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares y el Instituto Nacional de la Sordera y Otros Trastornos de la Comunicación de los NIH.

QUIÉN:

James A. Griffin, Ph.D., jefe de la subdivisión de Desarrollo y Comportamiento Infantil del NICHD, está disponible para comentarios en inglés.

ARTÍCULO:

Schiavo, JK, et al. Innate and plastic mechanisms in auditory cortex for maternal behavior. Nature.2020.

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Acerca del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver (NICHD): El NICHD lidera la investigación y la capacitación para comprender el desarrollo humano, mejorar la salud reproductiva, mejorar la vida de niños y adolescentes, y optimizar las habilidades para todos. Si desea más información, visite https://espanol.nichd.nih.gov.

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