Todos los conductores enfrentan riesgos, pero el factor que más contribuye a los accidentes y las muertes parecería ser la falta de experiencia.1 Los conductores con licencias nuevas, principalmente los adolescentes, tienen las tasas más altas de accidentes de tránsito, pero incluso los conductores de “veintilargos” tienen tasas más altas que los conductores de más edad.
Los factores de riesgo particularmente altos de los accidentes automovilísticos en los conductores adolescentes incluyen:
- Falta de experiencia1
- Pasajeros adolescentes2
- Distracciones al conducir, incluido el uso de teléfonos celulares y mensajes de texto3
- Conducir a velocidades excesivas, seguir muy de cerca al vehículo de adelante y otras conductas de riesgo al conducir4
- Beber alcohol y conducir. Si bien beber y conducir no es muy frecuente en los conductores novatos, causa una cantidad desproporcionada de accidentes mortales. En los últimos años de la adolescencia y los primeros años de la adultez, el hecho de beber y conducir aumenta dramáticamente.5
- Conducir por la noche
- Ser hombre. Los adolescentes varones, en especial aquellos con pasajeros varones, participan en más accidentes automovilísticos que las adolescentes del sexo femenino. Sin embargo, la cantidad de mujeres involucradas en accidentes automovilísticos está aumentando.6
- Normas sociales. La conducción arriesgada en los adolescentes es más alta en aquellos que informan que sus amigos conducen de manera arriesgada.4,7
Con frecuencia están presentes varios de los siguientes estos factores de riesgo: En particular, los adolescentes que envían mensajes de texto mientras conducen son más propensos de tener otras conductas de riesgo al conducir, en comparación con quienes no envían mensajes de texto mientras conducen. Los factores de riesgo adicionales incluyen beber y conducir y no usar cinturón de seguridad.8 Además, los conductores jóvenes que poseen sus propios vehículos podrían exponerse a más riesgos. Es más probable que conduzcan a alta velocidad, en especial por la noche, y que tengan dos o más pasajeros adolescentes con ellos.6
Un factor positivo para los conductores adolescentes es la presencia de un pasajero adulto. Un estudio mostró que las tasas de accidentes adolescentes eran un 75% más bajas cuando había un adulto en el vehículo.4