La pérdida del embarazo podría producirse por muchas razones, y en ocasiones la causa sigue siendo una incógnita incluso después de que se realicen pruebas adicionales.
Causas posibles
La pérdida del embarazo a menudo se produce cuando un embarazo no se desarrolla normalmente.
En muchos casos, los abortos involuntarios son producto de un problema con los cromosomas en el feto.1 La cantidad de cromosomas que tiene un feto ─demasiados o muy pocos— puede afectar su supervivencia.
Entre otras causas posibles de la pérdida del embarazo se incluyen las siguientes:
- Exposición a las toxinas del ambiente
- Problemas de la placenta, el cuello uterino o el útero2
- Problemas con el esperma del padre2
En muchos casos, no obstante, un proveedor de atención médica no puede identificar la causa o las causas de la pérdida del embarazo.
Factores de riesgo
Los problemas con cromosomas se producen con mayor frecuencia en los fetos de padres más grandes, en particular entre las mujeres que tienen más de 35 años.1 Por este motivo, el riesgo de pérdida del embarazo aumenta a medida que los padres envejecen; es mucho más alto a los 45 que a los 35 años de edad.1
Las mujeres que tuvieron abortos involuntarios anteriormente también tienen un mayor riesgo de pérdida del embarazo.2
Los problemas de salud, como las enfermedades crónicas, de la madre que también pueden aumentar el riesgo de embarazo incluyen los siguientes:
- Enfermedades crónicas, tales como presión arterial alta, diabetes, enfermedad tiroidea o síndrome de ovario poliquístico (SOP)
- Problemas con el sistema inmune, tales como trastornos autoinmunes
- Infecciones (como gonorrea o Zika sin tratar)
- Problemas hormonales
- Peso extremo, tales como obesidad o delgadez excesiva
- Factores del estilo de vida, como consumir drogas3 o alcohol,4 fumar5 o consumir más de 200 miligramos de cafeína por día (igual a alrededor de una taza de café de 12 oz)6,7
Los hallazgos de un estudio del NICHD sugieren que las mujeres que tienen un mayor riesgo de pérdida del embarazo debido a dos o más pérdidas anteriores podrían aumentar sus posibilidades de llevar un embarazo a término tomando una aspirina de dosis baja todos los días si tienen niveles altos de inflamación.
La investigación reciente también ha descubierto que las náuseas matutinas —náuseas y vómitos durante el embarazo— están vinculadas a un menor riesgo de pérdida del embarazo. Los investigadores del NICHD siguen su investigación para encontrar otros factores que podrían indicar un menor riesgo de pérdida del embarazo.