En un análisis de sangre se puede determinar si está vacunada contra la rubéola (también denominada sarampión alemán). Tener rubéola mientras está embarazada puede ser perjudicial para el feto. Debe estar vacunada contra la rubeola antes de quedar embarazada.1
Las STI como gonorrea, sífilis, clamidia y VIH pueden dificultar la concepción y también pueden ser perjudiciales para usted o para el bebé. El VIH es transmitido de una mujer a su bebé durante el embarazo o el parto. Este riesgo es inferior al 2 % si se administran ciertos medicamentos contra el VIH durante el embarazo.2 Obtenga más información sobre infecciones que pueden afectar su embarazo.
Según sus antecedentes médicos o de los de su pareja, su proveedor de atención médica puede derivarla a una consulta con un asesor en genética para ayudarla a determinar si tiene un riesgo alto de transmitir un trastorno genético, como fibrosis quística, el síndrome del cromosoma X frágil o anemia drepanocítica. Puede pedir que se le realice una prueba antes de la concepción para detectar si es portadora, la cual implica una muestra de sangre o de saliva.3 Encuentre un asesor en genética
mediante la Sociedad Nacional de Asesores en Genética (National Society of Genetic Counselors).
Su médico posiblemente quiera realizarle otras pruebas según el riesgo que tenga de sufrir otros problemas como anemia (una afección que provoca una disminución del recuento de glóbulos rojos1) o hepatitis (una infección hepática que se le puede transmitir al bebé4).